El actor uruguayo Enzo Vogrincic sigue deslumbrando al mundo del entretenimiento con su talento y carisma. La prestigiosa revista española Esquire recientemente dedicó una entrevista y una espectacular producción fotográfica a este joven revelación, destacando su meteórico ascenso en la industria cinematográfica.
“Habla español como tú y como yo, pero con acento uruguayo. Y, a pesar de que hasta hace poco era un auténtico desconocido dedicado a la profesión en circuitos indies de teatro, hoy es el rostro que todo el mundo reconoce gracias a una de las películas más vistas del año a nivel global: La sociedad de la nieve," así lo presenta Esquire España.
Enzo Vogrincic se ha convertido en un nombre familiar, tanto en la gran pantalla como en las pequeñas pantallas de millones de celulares alrededor del mundo. Su transición de actor independiente a estrella internacional y ahora influencer de moda es un fenómeno que incluso él mismo encuentra difícil de asimilar.
El periodista de Esquire lo describe con admiración: “Está claro que este tipo, con ese físico y esa cabeza, no podía seguir en el anonimato un año más. ¿Cosas del azar o remar para que el destino juegue a tu favor?”
En la entrevista, Enzo comparte sus impresiones sobre su participación en los Oscar y ofrece algunas anécdotas coloridas. "Yo miro ese evento con mucha perspectiva por mi propia historia, por la lejanía que hay entre ser un actor de Uruguay y asistir a esa gala. No existe un precedente. Desde esa dimensión tan remota, me sentí como un espía, como si realmente no fuera parte. Y desde esa mirada todo es bastante más espectacular… o bastante más decadente,” comentó Vogrincic. También recordó momentos sorprendentes, como “de repente en una fiesta en el lugar donde se filmó El Padrino y ver a DiCaprio en mitad de la pista bailando desatado, probablemente borracho [risas]. O cruzarme con Javier Bardem y que me salude como a un amigo que no ve hace tiempo, con una humanidad…”
Su profundidad y reflexión destacan en cada respuesta. Cuando le preguntaron sobre lo que quería transmitir al ser observado por todo el mundo, Enzo respondió: “La pregunta es qué quería esconder. Qué parte de mí quiero cuidar en ese contexto. Qué quiero seguir conservando para mí dentro de toda esa exposición. Se genera una cosa muy loca que todavía estoy analizando a partir de las alfombras, de las fotos, de las entrevistas: una especie de avatar de uno mismo. Una idea de la persona mezclada con el personaje que genera un tercer personaje. No soy yo del todo, tampoco puedo decir que no soy yo… Loquísimo. En general me ha favorecido, me va espectacular, pero no deja de ser solo una parte de mí.”
Sobre la sobreexposición mediática, Vogrincic afirma: “La clave para mí siempre es la honestidad con la gente que uno conoce. Siento que quien me conozca va a saber la verdad de las cosas o, en todo caso, me va a venir a preguntar a mí. Me importa la gente de mi entorno, de mi realidad. El resto es una visión muy superficial y exterior que a mí no me influye en mi día a día. Alcanza con apagar el teléfono o dejar de leer para que eso deje de existir. Yo tengo muy claro qué hago y qué no y eso me deja tranquilo. El resto es parte de este show de una colcha impresa con mi cara, una cita que no sé qué…”
Finalmente, Enzo reflexionó sobre sus raíces en Montevideo. “Mi familia es extremadamente pobre. Creces con cierto estigma, pero yo nunca percibí que ese límite fuera parte de mí.”