Compartí esta nota
El 23 de noviembre de 2024 la vida de Vitto Saravia cambió por completo con la llegada de su primer bebé, Lio, junto a su pareja Manu Desrets. Si bien su primogénito nació en Buenos Aires, la uruguaya no quiso perderse de disfrutar, como todos los veranos, de los encantos de su país. Por tal motivo, se instaló en José Ignacio para vivir sus primeros meses como mamá. Allí, fue descubierta por CARAS el pasado jueves 13 de febrero, realizando una caminata por el puerto de pescadores al atardecer junto a su pareja y su hijo.
Según pudo averiguar CARAS, ese día fue la primera vez que Lio iba a la playa. Lo disfrutaron muchísimo y se divirtieron sacándose fotos en familia, registrando ese momento único que quedará por siempre en sus recuerdos. También hubo tiempo para el relax, para disfrutar del sonido del mar, compartir un rico mate y llenarse de mimos y besos entre los tres. Vitto habló con CARAS por primera vez tras ser mamá y aseguró que la maternidad es más maravillosa de lo que pudo imaginar.
—¿Cómo han sido estos primeros meses como mamá primeriza?
—No es para romantizar la maternidad, pero de verdad que están siendo maravillosos. Nunca imaginé algo así, sobre todo como madre primeriza. Mis amigas me dicen que pareciera que fui mamá toda la vida. El desafío más grande es la lactancia, sin dudas, pero todo es disfrutable: su olorcito, sus sonidos. Lio es un capo, un bebé súper bueno, tranquilo, que se adapta perfecto a nosotros.
Más allá de ser un bebé recién nacido, se acopló perfecto en nuestras vidas. Llora solo si tiene hambre o algún cólico, pero por suerte la llevamos súper. Solemos adelantarnos a sus necesidades para que no agarre el hábito de llorar, y eso nos hace mantener un ambiente siempre pacífico, tanto para nosotros como para él.
Venimos muy bien con la organización, se generaron hábitos que pasaron a ser cotidianos para nosotros y eso está buenísimo. Lo amamos como hijo y como bebé bueno que está siendo.
—¿Qué actividades disfrutan en Punta con Manu y Lio?
—Por ahora, la actividad es el día a día: ir conociéndolo, viéndolo crecer, descubriendo sus gestos, lo que le gusta, su temperamento.
Y el momento del baño también es algo súper lindo e íntimo que a él le encanta, y nosotros sabemos que después de eso duerme como un campeón.
—¿Cómo es Manu como papá?
—Manu es un crack, tiene alma de padre. Es dulce, paciente, se involucra en todo y está loco de amor por Lio. Estamos viviendo una maternidad y paternidad a full.
—¿Hizo un break en su trabajo? ¿Cómo organiza su vida laboral con la de mamá?
—Hice un break lógico en cuanto a concurrencia de eventos, pero desde casa te hago todo. Yo nunca paro, aunque es cierto que cada vez elijo mejor.
Es decir, me interesan trabajos alineados a mi momento actual, que si se llevan tiempo realmente valga la pena.
Y por ahora soy mamá full time, no tengo nanis, soy solo yo. Sí tengo quien me ayuda con las cosas de la casa, pero de Lio nos encargamos el papá y yo estos primeros meses porque así lo elegimos.
—¿Cómo están viviendo sus familias la llegada de Lio?
—Es el primero de esta generación para ambas partes, así que imaginate (risas).
Lio es el primer nieto, bisnieto, y el bebé de las familias. Así que primos, tíos, todos están fascinados.
Además, como te decía, Lio es un placer de bebé. Te dan ganas de estar con él, es un divino plan estar con él, y las abuelas están chochas y lo llevan muy bien.
—¿Qué es lo que más la emociona de ser mamá?
—Lo que más me emociona hasta hoy, que incluso si lo hablo se me llenan los ojos de lágrimas, es el parto.
¡Qué momento, por favor! ¡Qué poder tenemos como mujeres! El momento más salvaje, sin dudas, que viví en mi vida y me parece algo inexplicable.
Me emociona, me sensibiliza, me da fortaleza, son muchas sensaciones a la misma vez.
—¿La maternidad es como se la imaginaba?
—Sin dudas, la maternidad es mucho mejor de lo que me imaginaba. Es un regalo, un upgrade en la vida de cualquier mujer.
Fotos: Pablo Kreimbuhl
Texto: María Noel Álvarez
