En la era digital en la que vivimos, el uso de dispositivos electrónicos, como smartphones, tablets y computadoras, se ha vuelto omnipresente. Sin embargo, muchos expertos en salud han advertido sobre los efectos perjudiciales que el uso de pantallas antes de dormir puede tener en nuestro descanso nocturno. En este artículo, exploraremos las razones por las cuales se desaconseja esta práctica, especialmente en el contexto rioplatense.
1. El efecto de la luz: Nuestro organismo cuenta con un reloj biológico interno que regula nuestros ciclos de sueño y vigilia. La luz azul emitida por las pantallas interfiere con la producción de melatonina, la hormona responsable de regular nuestro sueño. El contraste de la luz artificial de las pantallas puede afectar aún más nuestros ritmos circadianos.
2. Estimulación mental: Las actividades realizadas en dispositivos electrónicos antes de dormir, como revisar redes sociales, leer noticias o ver videos, pueden ser emocionalmente estimulantes y dificultar la relajación necesaria para conciliar el sueño. Este tipo de estímulos adicionales pueden afectar aún más la actividad cerebral antes de ir a dormir.
3. Dificultades para desconectar: El uso de pantallas crea un vínculo constante con la tecnología y nos expone a información incesante. En el contexto rioplatense, donde el ritmo de vida puede ser acelerado y la conexión social es muy valorada, desconectarse puede resultar un desafío. El uso de pantallas antes de dormir puede provocar una dependencia difícil de romper, lo que puede interferir en nuestra calidad del sueño.
4. Alteraciones emocionales: Distintos estudios han demostrado que el uso de pantallas antes de dormir puede estar asociado con problemas de ansiedad, depresión y estrés.
Está claro que el uso de pantallas antes de dormir no es recomendado. Los efectos negativos en nuestro sueño, ritmos circadianos, bienestar emocional y capacidad de desconexión son motivo suficiente para replantear nuestras rutinas nocturnas. Si queremos lograr un descanso saludable y de calidad, es fundamental establecer límites al uso de dispositivos electrónicos y priorizar la desconexión antes de acostarnos. ¡Tu sueño y bienestar te lo agradecerán!