Felipe Klüver: “Mi pareja dejó todo para acompañarme”

Hasta último momento consagrarse campeón del mundo era un sueño. Felipe Klüver logró lo que creía imposible y escribió un capítulo fundamental en la historia del deporte uruguayo. El pasado sábado 30 de julio, el remero oriundo de Mercedes, se quedó con la medalla de oro en la categoría peso ligero del Mundial Sub 23 que se disputó en Varese, Italia.

Una vez más, Klüver volvió a llevar al podio los colores de su bandera —ya en los Juegos Olímpicos de Tokio había obtenido, junto a su compañero Bruno Cetraro, una medalla de bronce— un logro histórico en este deporte que cada día genera más interés y adeptos en nuestro país. “Ser campeón del mundo es algo que se sueña desde que uno arranca un deporte. Al principio lo soñaba como algo imposible, pero a medida que fue pasando el tiempo, cada vez parecía más alcanzable. Hasta que estuve a tan solo 2000 metros de lograrlo, no desperté de ese sueño. A medida que van pasando los días, me emociona más”, dijo el remero en exclusiva a CARAS.

Como todo deportista de alto rendimiento, su vida está cronometrada según el exigente entrenamiento. Además, los viajes para participar en las competencias le dejan poco tiempo para el esparcimiento. En este contexto, parece difícil que una relación de pareja pueda prosperar, sin embargo, cuando hay amor verdadero, todo se puede. Felipe está en pareja con Agustina Fernández, una joven que se convirtió en su gran apoyo. Desde el mes de febrero se mudaron a Sevilla, España, donde el deportista se instaló para prepararse al mejor nivel mundial, con el gran sueño de competir en París 2024.

“Mi pareja ha sido un pilar fundamental en todo esto este último tiempo. Cuando le planteé que era una buena oportunidad vivir en Sevilla, le dije que quería que viniera conmigo. Ella es enfermera y tenía su trabajo estable, además de su familia y amigos. A pesar de esto, renunció a todo para acompañarme. Asimismo, no ha sido fácil, ella ha estado esperándome en cada viaje sola, en Sevilla. Sabía cuáles eran y son mis objetivos y ahí está siempre apoyándome, animándome”, dice, y deja claro que Agustina también forma parte del equipo que lo llevó al podio.

“Juntos lo hemos logrado y nunca me ha dejado caer. Me acompaña y viaja conmigo cuando puede, y también va a los entrenamientos. Lejos o cerca, siempre está ahí. Sin dudas es la mejor compañera”, sostiene.

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